martes, 22 de noviembre de 2011

Una cultura de pura mierda.

No estoy de acuerdo con que la apariencia de uno esté regida por su cultura ni con que se acepten ciertos justos sólo cuando uno es joven. Quiero decir, si a los casi 16 años tengo el pelo corto como un pibe, teñido actualmente después de mil colores, de un rojo muy extraño, está aceptado; de todas formas lo mas probable es que si me ves por la calle, pienses que soy o una enferma, o una pendeja que quiso resaltar. La realidad, es que me aburro muy rápido de todo, y tengo problemas con mi autoestima, una de las pocas cosas que me la sube un poco, es mi pelo, si está lindo, me conformo. Y sí, estaré loca, pero no tiene nada de malo, soy una loca linda, una loca buena. Me gusta improvisar, dejarme llevar y disfrutar de la vida y del progreso. Ahora si una mujer de 40 años se viste con una camisa linda, una pollera sin medias y zapatillas o sandalias cómodas, es una ridícula y una desubicada que se quiere hacer la pendeja. Okay, muchas veces sí lo es, pero ahí esta el punto, MUCHAS veces, por qué generalizan? Porque eso hacen todos. No puede simplemente ser alguien conforme con su cuerpo, ni con un gusto más moderno. No, ahora resulta que porque uno crece, se vuelve anticuado y formal; la realidad es que uno cambia pero no tiene por qué empeorar. Entiendo que tenga que sujetarse a cada situación y que no vas a ir a una entrevista laboral con una remera vieja de los Stones y un jean roto, pero no tenés porque vivir de polera y pantalones. La imagen no se rige por la cultura. Loco, a mi me gusta teñirme el pelo y tener un piercing en la nariz, eso no va a cambiar, pero no por eso soy un ser menos pensante, maleducado o cruel como creen que debería ser. Para colmo qué? 'Me hago la madura'. Si a los casi 16 no PODES entender nada de la vida. Chau, listo.

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